La tarde de este lunes 04 de marzo del año en curso, un mujer madre de familia acudió a las instalaciones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del Estado, en donde indicó haber recibido amenazas vía telefónica sobre el posible secuestro de su hija e hijos menores de edad, de inmediato solicitó el apoyo policiaco para su pronta localización y señaló que los presuntos criminales le solicitaban la cantidad de 200 mil pesos a cambio de la liberación de sus hijos; el acto de extorsión no fue consumado gracias a la intervención de la Guardia Civil Estatal.
Agentes de la GCE se entrevistaron con la afectada y recabaron información sobre las señas particulares de los infantes no localizados, de inmediato se desplegó un operativo en los alrededores del domicilio de la posible víctima. Fue en la calle de Estados Unidos de Norteamérica, en la colonia Simón Díaz, en donde las autoridades estatales visualizaron a tres menores que iban en compañía de una persona de la tercera edad, mismos que cumplían con las características físicas y señas otorgadas por la madre de familia, de inmediato les abordaron.
La adulta mayor, quien se identificó como abuela de los infantes, indicó que se dirigían a su domicilio, por ello les brindaron acompañamiento y seguridad. Al arribo al lugar, se entrevistaron con el abuelo de los menores, quien manifestó que los niños estaban escondidos en unos arbustos cerca de la casa, ya que fueron amenazados vía telefónica por personas desconocidas señalando que les harían daño a ellos y a su familia si no hacían caso de lo que les indicaban, por ello salieron de su casa sin avisar a nadie.
Gracias a la intervención policiaca, se evitó que la familia depositara dinero en efectivo a los presuntos criminales, al tener contacto con los menores y sus abuelos, de inmediato se le dio aviso a la progenitora que la niña y niños se encontraban a salvo y sin lesiones. Tras reunir a los pequeños con su madre, se les explicó que lo ocurrido era un secuestro virtual, por ello les brindaron las atenciones humanitarias debidas e indicaron que no debían contestar ni hacer caso a llamadas de números desconocidos.
La familia recibió información sobre cómo es el modus operandi del secuestro virtual y de la extorsión telefónica, para evitar que este tipo de hechos se repita nuevamente, exhortando a los adultos a estar al pendiente de con quienes hablan sus menores y revisar en todo momento sus equipos de telefonía, ya que por ser menores de edad, deben tener mayor precaución en el uso de estos dispositivos.